jueves, 28 de abril de 2011

A HUEVO DEL WEREVR

WEREVER BN ORGAMIAS
ESTO ES ALGO IMPRESIONANTE

SOCIOALCHÓLICOS


El alcohol es una de las drogas de venta legal que se consumen con más frecuencia en nuestro entorno sociocultural. Es un depresor del sistema nervioso central y sus efectos dependen de factores como la edad, el peso, el sexo o la cantidad y velocidad con que se consume. El abuso de alcohol conduce al alcoholismo o dependencia del alcohol, enfermedad crónica producida por el consumo prolongado y en exceso de alcohol etílico. El alcoholismo es un problema muy grave en muchos países, que supone un coste personal, social y sanitario muy elevado.


 
    Un concepto erróneo común es pensar que la
·         cerveza o vino, no son tan peligrosos como el licor
·         corriente. Debido a este concepto equivocado, de
·         hecho pueden ser más peligrosos. Las bebidas      antes   mencionadas todas contienen cantidades idénticas de alcohol.

Una Droga inusual.
     El Alcohol es una de las drogas con un comportamiento diferente a otras drogas pues no requiere digerirse, se absorbe rápidamente  al torrente Sanguíneo,  desde el estómago e intestino delgado proximal. Debido a que el alcohol es un líquido y no necesita desplazarse lejos, se absorbe rápidamente, y sus efectos son percibidos inmediatamente. La comida en el estómago retarda la absorción del alcohol, por consiguiente, puede retrasar algunos de sus efectos. 

 EL ABUSO DE ALCOHOL PRODUCE

          Hepatitis alcohólica
          Cirrosis hepática alcohólica  

 



















jueves, 21 de abril de 2011

SOCIOALCOHOLICOS

¿POR QUÉ BEBEN LOS JÓVENES?
CINTHYA SÁNCHEZ
El Universal
Martes 25 de julio de 2006
¿Por qué beben los jóvenes? Porque todo está hecho para que lo hagan. Hay oferta de bebidas alcohólicas a unos pasos de las escuelas, en reuniones sociales, en fiestas, en centros nocturnos con barra libre y en su casa. Mayor flexibilidad de los padres, unas leyes sensiblemente violables y que permiten que los dueños de los establecimientos que venden alcohol a menores se escuden a través de amparos, y por supuesto, también por problemas sociales como desempleo, falta de oportunidades y desencanto social.
Esto aunado a un historial genético alcohólico y a una cultura mexicana donde brindar por casi cualquier cosa es una costumbre cotidiana, explican por qué en los últimos siete años los jóvenes menores de edad reconocen en un 18% más que no sólo beben alcohol sino que abusan de él, según cifras del Consejo Nacional contra las Adicciones (Conadic).
Es común que los jóvenes piensen que cuando se habla de alcohólicos se trata de "palabras mayores", que el título le pertenece sólo al vagabundo de la esquina que se encuentra ebrio y tirado en la calle o al tío arrepentido que asiste a las reuniones de AA, pero la realidad es que existen alcohólicos en grandes cantidades entre los jóvenes mexicanos porque beber más de cuatro copas en cada ocasión en caso de ser hombre, y más de tres copas en caso de ser mujer, es señal de que no se tiene control con el alcohol y que hay ya un problema de alcoholismo.
"El autocontrol no es dejar de beber de domingo a jueves, y viernes y sábado beber de más. Una persona que controla su consumo de alcohol es aquella que no sobrepasa el trago estándar (cuatro y tres copas) por ocasión, y que además las bebe fraccionadas, es decir, una por hora, el problema es que los jóvenes mexicanos son bebedores explosivos; es decir, beben sólo los fines de semana, pero se emborrachan", explica Raúl Martín del Campo, subdirector técnico en adicciones del Conadic.
Ya en 2003 las cifras eran alarmantes para la Central Mexicana de Alcohólicos Anónimos pues su encuesta reportaba que el 7.3% de los agremiados a AA eran menores de 20 años. Hoy, esperan los resultados de la encuesta 2006 y María Eugenia Rubalcaba, coordinadora del Comité de Información Pública de AA, asegura que está cifra se elevará.
"En los últimos años hemos visto con más frecuencia el ingreso a AA de adolescentes de entre 15 y 17 años de edad que ya tienen un problema de alcoholismo severo y que comenzaron a beber desde los 11 o 12 años", explica.
Según las últimas cifras del Conadic, en México 90% de la población mayor de 15 años consume alcohol y por cada 10 hombres hay cinco mujeres que lo toman en cantidades excesivas.
"La ingesta de alcohol entre las mujeres ha aumentado: en 1993 se reportó una mujer por cada 18 hombres que bebían, tres o más veces por semana. En el 2000 el 30% de las mujeres aceptó beber con frecuencia", explica Martín del Campo.
Las tendencias en el índice de consumo de alcohol de adolescentes (12 a 17 años) presentan un incremento: de 27% en 1998 a 35% en 2002 entre los varones. En el caso de las mujeres pasó de 18% a 25% durante este tiempo.
Motivos y lugares para beber
Los motivos que los jóvenes expresan para consumir alcohol varían de acuerdo a la edad: los adolescentes, por ejemplo, dicen que en un 71% lo hacen por convivir.
Los jóvenes estudiantes de licenciatura señalan en 31% que lo que buscan es el efecto placentero del sabor y la sensación producida por el alcohol.
En cuanto a la edad de los adolescentes, se observa que el porcentaje de consumidores de 14 años o menos, es casi la mitad en relación con los que tienen 18 años o más.
Adicionalmente, los resultados indican que 23% de los estudiantes consumen cinco copas o más por ocasión de consumo, al menos una vez al mes.
Pero ¿dónde se emborrachan? Los adolescentes inician su relación con el alcohol en tres lugares específicamente: en las reuniones con sus compañeros de escuela, en el interior de los coches que les regalan sus padres y en las canchas de futbol, según las experiencias que reporta AA.
"Como cuentan con poco dinero, la opción de un adolescente es comprar una ´caguama´ o una botella de mezcal, tequila o ron de baja calidad en una vinatería y beberla ya sea en la casa de un amigo que tiene papás que trabajan y por lo tanto no están para vigilar o bien beber mientras dan vueltas por su colonia a bordo de un automóvil, y por supuesto, después de los partidos de futbol afuera de las canchas", dice María Eugenia Rubalcaba de AA.
DESSESPERACIÓN

miércoles, 6 de abril de 2011